¿Sabías que comer saludable también ayuda a evitar el estreñimiento? Así lo reveló un estudio publicado en Gastroenterology. En dicho trabajo se examinaron cinco patrones de alimentación, y se confirmó cuál es la mejor dieta para reducir el riesgo de esta afección gastrointestinal crónica. Conoce sus beneficios particulares.
Dos dietas clave para prevenir el estreñimiento crónico, según la ciencia
El reciente estudio confirmó que comer saludable también ayuda a evitar el estreñimiento crónico. Concretamente, la investigación analizó la relación entre cinco dietas comunes, sus componentes e influencia en esta afección gastrointestinal crónica, y se demostró que la dieta mediterránea y basada en plantas son las más efectivas.
Según el doctor Kyle Staller, especialista en salud pública, de la División de Gastroenterología del Hospital General de Massachusetts, miembro fundador del sistema de salud Mass General Brigham, “el estreñimiento crónico afecta a millones de personas y puede afectar significativamente su calidad de vida”.
Por esto, los investigadores examinaron exhaustivamente cinco patrones dietéticos para determinar su eficacia en la prevención del estreñimiento crónico en personas de edad mediana y adultos mayores.
En este trabajo, se estudiaron los diferentes hábitos de alimentación de más de 95.000 adultos durante varios años, para comprender cómo estos comportamientos impactaron en el desarrollo del estreñimiento crónico, que se definió como tener síntomas durante al menos 12 semanas en un año.
Utilizando datos del Nurses' Health Study, Nurses' Health Study II y el Health Professionals Follow-Up Study, se incluyeron estas cinco dietas en el análisis:
1. La dieta mediterránea.
2. La dieta basada en plantas.
3. La dieta baja en carbohidratos.
4. La dieta occidental.
5. La dieta inflamatoria.
Dieta mediterránea y basada en plantas: reducen el estreñimiento hasta un 20%
Dieta mediterránea y basada en plantas: reducen el estreñimiento hasta un 20%
Después de 2 a 4 años de seguimiento, los investigadores observaron más de 7.500 casos nuevos de estreñimiento crónico.
Hasta el momento, estudios anteriores habían demostrado que una dieta saludable podría mejorar los síntomas del estreñimiento, pero este nuevo trabajo reveló que ciertas dietas pueden ayudar a prevenir su aparición.
Los resultados mostraron que seguir una alimentación basada en vegetales, como la dieta mediterránea o una dieta basada en plantas, reduce significativamente el riesgo de estreñimiento: entre un 16% y un 20% menos respectivamente.
Ambos patrones alimenticios incluyen entre sus componentes alimentos, como verduras, legumbres, frutas, frutos secos y aceite de oliva extra virgen.
Por otro lado, los investigadores descubrieron que las personas que seguían dietas poco saludables -incluyendo productos ultraprocesados, carnes rojas, grasas saturadas y azúcares-, como la dieta occidental o las dietas inflamatorias, tenían un riesgo entre un 22 % y un 24 % mayor de estreñimiento, respectivamente.
En tanto, los participantes que consumieron una dieta baja en carbohidratos no mostraron un riesgo significativamente mayor de padecer estreñimiento crónico, ya que se ubicó alrededor del 3%.
Dieta mediterránea y basada en plantas: reducen el estreñimiento hasta un 20%
Algo importante que reveló el estudio es que estos resultados no dependían únicamente de la cantidad de fibra que se consume, sino del tipo de dieta en general.
"Siempre hemos asumido que los beneficios de una dieta saludable se deben a la fibra, pero nuestros análisis demostraron que el beneficio de estas dietas saludables sobre el estreñimiento es independiente de la ingesta de fibra", afirmó Staller.
"Nuestros hallazgos sugieren que los patrones dietéticos que enfatizan los alimentos de origen vegetal y las grasas saludables pueden proteger contra el estreñimiento, lo que informa futuras intervenciones dietéticas y tratamientos para el estreñimiento crónico", agregó.
Es decir, no alcanza con añadir fibra si el resto de la alimentación es desbalanceada. Por lo tanto, incluir más vegetales y reducir el consumo de productos procesados mejora la salud general y, en particular, protege el sistema digestivo.
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